25 de diciembre de 2010

Punto y final a 2010



Los escaparates ya se llenan de productos, juguetes y ropa. Las ofertas están a la vuelta de la esquina. El fríoártico se ha ganado un rincón entre nosotros y los puestos ambulantes de castañas pueblan cada esquina de nuestra ciudad. En efecto, la navidad trae consigo todos estos menesteres en tanto que acorta la vida de este año mágico.

Dejando cuestiones económicas y políticas aparte, que no atraviesan su mejor momento, éste fue el año soñado para el deporte español. No podemos olvidar aquel memorable 11 de julio que puso fin a años de sequía, maldiciones y decepciones de las que generaciones y generaciones han sido testigo.

Todos sabíamos que ésta era la gran oportunidad para el fútbol español. Las casas de apuestas nos avalaban, el juego era sublime y la suerte nos sonreía. Pese a debutar en el Mundial perdiendo contra Suiza (que le costaría la ceja a Piqué) nos pusimos las pilas rápidamente y emprendimos el camino hacia la final de Johannesburgo no sin antes tumbar a Alemania en un soberbio partido en el que Carles Puyol nos encumbró a la final con un soberbio testarazo. Los alemanes se portaron como caballeros.

Nos preparábamos para una final inédita entre España y Holanda, los reyes sin corona. Los tulipanes habían eliminado a la siempre todopoderosa Brasil en cuartos y con más táctica que juego se presentaron en la final contra todo pronóstico. Allí, ni jugaron ni dejaron jugar, por decirlo de algún modo. O si no, que se lo pregunten a Xabi Alonso.

En los minutos dramáticos, a escasos compases para la tanda de penaltis, Andrés Iniesta enganchó un fantástico tiro cruzado a la cepa del palo. Stekelenburg no pudo hacer nada. Puede que muchos no lo supieran pero era cierto. España era campeona del mundo por primera vez en su historia y, de esta forma, entraba en una lista selecta compuesta por selecciones cuyos míticos capitanes alzaron al cielo la Jules Rimet.

En nuestra Liga, 2010 volvió a ser el año del Barça. No se ganaron seis títulos pero sí se pudieron conseguir dos. El Barça de Guardiola batía récords a la vez que Messi lo hacía cada vez mejor. Se ganó la Liga más larga, la Liga de los noventa y nueve puntos. Sólo el Sevilla y el Inter eliminaron a los azulgrana de la Copa del Rey y de la Champions, respectivamente. José Mourinho puso fin al sueño culé de jugar la final de Liga de Campeones en el Bernabeu. Curiosamente, los dos únicos equipos que eliminaron al Barça se proclamaron campeones de esa correspondiente competición.

El Real Madrid volvió a liarla. Como dice Eduardo Inda, por lo civil o por lo criminal (nótese la cita célebre). Dada la supremacía del Barça, el Madrid fichó a José Mourinho tras destituir a Manuel Pellegrini. El portugués anunció su salida del Inter de Milan el dias después de ganar el triplete con los italianos. De este modo, se apostaba por un gran entrenador para hacer sucumbir al Barça sin saber que las cosas no son tan fáciles como extender el talonario.

En realidad, el comienzo de temporada para los blancos fue dudoso. El Madrid no sabía a lo que jugaba y tenía poca profundidad en el juego a pesar de ser una formación típicamente ofensiva. Con el tiempo, protagonizó goleadas contra el Racing, Bilbao o Ájax pero no no se pudo evitar la manita en el Camp Nou. Una fiebre futbolística que jugaba con los jugadores blancos como si fueran títeres en manos del Barcelona.

Finalmente, un rotundo 5-0 con dos goles de David Villa que cerraron muchas bocas, espectaculares actuaciones de Cristiano Ronaldo y pases inverosímiles de Messi que una vez más se quitó el traje de goleador para ponerse el de pasador.

No hay que olvidar que fue un gran año para el Atlético de Madrid con la consecución de la Europa League y de la Supercopa de Europa ante el Inter de Milán, campeón de todo. Asi, los de Quique Sánchez Flores ponían fin a un ciclo en el que no se conseguía nada desde 1996 con aquel glorioso doblete. El Kun Agüero, Forlán y Reyes volvieron a ser los grandes protagonistas.El Atleti se coronaba en el Olimpo de Europa, de donde nunca debió bajar.

También el podio en el FIFA Balón de Oro está compuesto por jugadores del Barça. Si se lo lleva Xavi, será un galardón merecidísimo a su dilatada y exitosa carrera, así como su imprescindible actuación en el Mundial de Sudáfrica.

Personalmente, fue un buen año. Un año de aprendizaje, de madurez, de buenos momentos. Conocí personas increíbles mientras que conocí mejor a otras que me mostraron su mejor faceta. También hubo algunas decepciones pero, desde luego, quedaron eclipsadas por grandes momentos que compartí. Sinceramente, espero que en 2011 se cumplan tantos los proyectos que abarrotan mi agenda como los tuyos, querido lector, y que el deporte siga haciéndonos disfrutar y, ante todo, hacernos felices.

 Mientras jugaba de un modo espectacular, el Barça consiguió la friolera de 99 puntos que le dieron su vigésimo título de Liga.

 En la final de Hamburgo, el Atlético de Madrid doblegó al Fulham por un marcador de 2-1 con Diego Forlán como estrella goleadora. Era el primer título después de catorce años y no menos sufrimiento de la afición colchonera.
 Iniesta dedicó su gol en la final a su amigo y compañero Dani Jarque que nos había dejado casi un año atrás. Meses después en Cornellá, tras ser sustituido, recibió una calurosa ovación. Chapeau, Andrés!

El último título hasta hoy de la Era Pep fue la Supercopa de España lograda ante el Sevilla. Fue la revancha de la eliminación en la Copa del Rey de la pasada temporada. Asimismo, la magia de Messi aumenta exponencialmente hasta situarlo como el mejor jugador del mundo.

 El broche de oro de la gran gesta atlética fue la victoria ante el Inter de Milán en Mónaco en la Supercopa de Europa. Así, evitó que los nerazurro hicieran sextete, una hazaña reservada para los más grandes. Un 2-0 con goles de Agüero y Reyes hicieron realidad el gran sueño rojiblanco y el Atleti se proclamaba mejor equipo de Europa.

20 de diciembre de 2010

Jugadores históricos: René Higuita


Si echamos un vistazo a la historia moderna del fútbol sudamericano, merece una visita obligada uno de los guardametas más emblemáticos: José René Higuita Zapata. Junto con Hugo Gatti y su particular personalidad, fue nombrado mejor portero sudamericano del siglo XX.

Sus inicios en el balompié fueron peculiares. Nacido en Medellín, conoció la orfandad a muy temprana edad por lo que viviría con su abuela. Las dificultades económicas que atravesaron fueron la causa de que trabajara como vendedor de periódicos entre otros oficios. Cuando realizó las pruebas para el Independiente de Medellín, acudió como goleador de su equipo pero una lesión del portero le colocó en la portería donde se alzaría como indiscutibe. Un hecho realmente anecdótico.

Pero el guardameta colombiano marcó un antes y un después en la historia del fútbol. Tras el Mundial de Italia '90 y las arriesgadas actuaciones de Higuita, un congreso técnico habló de la importancia del uso de los pies en el guardameta lo que condució a la norma de que si un jugador devuelve la pelota al portero mediante los pies, éste no podrá cogerla con las manos, para avivar la esencia del juego.

El escándalo también se hizo un hueco en la vida de nuestro carismático portero. En 1991, fue a visitar a la cárcel al narcotraficante Pablo Escobar del que declaró públicamente que era amigo. El incidente de mayor importancia ocurrió en 1993 cuando fue acusado de secuestro al mediar en la liberación de la hija de un amigo, estando dicho acto prohibido por el sistema judicial colombiano. Por este motivo, estuvo recluido en la prisión lo que le costó su participación en el Mundial de USA '94. El entonces seleccionador Pacho Maturana declaró que la selección sin él era muy distinta puesto que aportaba armonía, serenidad y buen rollo en el equipo.


A nivel de clubes, jugó en Millonarios de Bogotá, Atlético Nacional, Real Valladolid, Tiburones Rojos de Veracruz, Independiente de Medellín y la lista es mucho más amplia. A nivel anecdótico, participó en la edición colombiana de La isla de los famosos en 2005.

Aunque hay algo de lo que hay que hablar. Tanto si hablamos de Higuita como del fútbol colombiano en general, hay una jugada muy conocida que obviamente merece su rincón. Efectivamente, todos recordamos su famosa parada escorpión que nos regaló El Loco. Se trataba de un partido intrascendente entre las selecciones de Inglaterra y Colombia en el legendario estadio de Wembley el 7 de septiembre de 1995. En un partido que acabó con resultado gafas, una selección inglesa en la que jugaban Shearer, McManaman y Sherigham entre otros, un potente tiro bombeado y colocado desde la frontal del área por parte Jamie Redknapp fue atajado por este atípico guardarredes haciendo una especie de pino y golpeando el balón con la suela de las botas, suspendido en el aire. Wembley estalló en aplausos.

Jamie Redknapp, hijo del actual entrenador del Tottenham, primo de Frank Lampard y ex del Liverpool aún piensa en aquella chistosa parada.

19 de diciembre de 2010

Jugadores que fracasaron en el Barcelona

 

De todos es sabido que un gran número de futbolistas cuyos nombres forman parte de la historia de este gran deporte han formado parte de la plantilla del Fútbol Club Barcelona en algún momento u otro. Se me ocurre pensar, entre otros, en Maradona, Johan Cruyff, Kubala, Ronaldo, Romario, Ronaldinho, Figo o Thierry Henry. Por supuesto, también hablamos de jugadores que están triunfando en la actualidad tanto a nivel del club como con la camiseta nacional como Xavi, Messi, Iniesta, Piqué, Puyol...

Jugar y hacerlo a buen nivel en un grande de Europa y, por qué no decirlo, del mundo requiere, además de unas insustituibles condiciones técnicas, una regularidad. Rendir a largo plazo de forma rentable significa mantener un alto nivel de competitividad y una constancia. De nada sirve hacer un partido perfecto y descompensarlo con varios de escasos nivel o, simplemente, estar desaparecido en comparte. Como en cualquier gran club, esto es un requerimiento clave en el Barça, aunque no el suficiente.

Pero, en realidad, no todos los futbolistas que vinieron con la vitola de crack triunfaron en el Camp Nou. Algunos prometían mucho y toda su magia se quedó ahí. Algunos sufrieron la presión de la prensa. Otros no se adaptaron al ritmo de la ciudad condal. Otros simplemente no cuajaron por azares del destino y fracasaron estrepitosamente. Se podría decir que venían de estrella y se estrellaron. Echémosle un vistazo a los más renombrados:

Emmanuel Amunike: En 1996, Josep Lluís Núñez quiso dar la campanada fichando a un buen jugador y se trajo a este centrocampista nigeriano por tres millones de euros. Pese a que en aquella campaña el club ganó la Recopa y la Copa del Rey, las lesiones fueron las responsables de que no rindiera adecuadamente. De hecho, se perdió el Mundial de Francia por lesiones en la rodilla. Nunca se recuperó totalmente y acabó su carrera en Jordania.

Dragan Ciric: Procedente del Partizán de Belgrado, era la apuesta de Louis van Gaal. Se suponía que era hábil por el costado derecho y tenía gol. Tras dos temporadas en el club no marcó ni un solo tanto.

Winston Bogarde: Formó parte de la mítica plantilla del Ájax de Ámsterdam que en 1995 ganó la Copa de Europa. Antes de recalar en el Barça, jugó en Excelsior de Rotterdam, Sparta y Ájax. Apodado KillHesp por el gol que le metió en propia a Hesp, en 1998 fichó por el conjunto azulgrana y permaneció dos temporadas hasta que en el año 2000 fue traspasado al Chelsea donde acabó su carrera.

Carles Busquets: Jugó diez temporadas en el Barça, desde 1988 hasta 1998 como portero suplente de Zubizarreta en el Dream Team de Johann Cruyff. Sólo fue titular desde 1994 hasta 1996 a la sombra de Andoni.

Jordi Cruyff: Se formó en la Masía y debutó en Primera en 1994 en un Sporting 2-1 Barça cuando su padre era entrenador. Otro pariente de que no triunfó. Ha jugado también en Alavés, Manchester, Celta, Espanyol y actualmente milita en el Valletta de la liga maltesa. Jugó en la selección holandesa, llegando a disputar la Eurocopa de 1996 tras ser seleccionado por Guus Hiddink.

Jesús Angoy: El yerno de Cruyff tuvo mala suerte en su carrera de portero. Tanto es así que se  retiró con treinta años y posterormente probó suerte en el fútbol americano como placekiker.

Emmanuel Petit: Recordado por su gol ante Brasil que supuso el 3-0 con el que Francía ganó el Mundial. También jugó la Eurocopa del 2000 y fue un jugador importante en el Arsenal plagado de futbolistas galos como Vieira, Wiltord, Parlour y Henry. Sin embargo, cuando llegó al Barça de la mano de Lorenzo Serra Ferrer, el técnico balear le preguntó textualmente: ¿Y tú de que juegas? Todo ello lo publicó el francés en su libro Au flor du peau donde ponía de vuelta y media a muchos de sus compañeros.

 
Robert Prosinecki: Jugador croata de gran talento y artífice del tercer puesto que alcanzó su selección en el Mundial de 1998. En el Madrid no pudo demostrarlo a causa de una serie de lesiones y sus gustos por las fiestas así que, cansados de él, lo traspasaron al Oviedo hasta que en 1995 recaló en el Barcelona. Allí actuó como elemento baladí del banquillo.

 Michael Reiziger: Fue un hábil lateral que jugó en grandes equipos europeos como Ájax, Milan y Barça, además de ser internacional con Holanda durante la década de los noventa y años venideros. Fue un gran defensor aunque en Barcelona no pudo demostrar su talento.

 
Marc Overmars: El Barcelona le pagó al Arsenal unos 6500 millones de pesetas en el verano del año 2000 a cambio de los servicios del jugador holandés. Pero no todo fue un camino de rosas porque llegó justo el año en que Figo traicionó al Fútbol Club Barcelona al fichar por el Real Madrid con lo que sobre él recayó la papeleta de hacer olvidar al astro portugués. También contaba con la presión de justificar la gran suma de dinero que el conjunto azulgrana desembolsó por él y por último, pero no menos importante, demostrar la fama de crack que había demostrado años atrás. Todo esto en un marco desfavorable porque los cuatro años que el holandés permaneció en el equipo coincidieron con la etapa negra en la que no se consiguió ningún título.


Bodo Zenden: Otro trotamundos del fútbol internacional que ja jugado en clubes como PSV Eindhoven, Chelsea, Liverpool, Middlesbrough, Barça y Marsella. Pese a haber formado parte del club azulgrana que en la temporada 1998/1999 ganó el título de Liga, su paso por la ciudad condal fue efímero y fue traspasado al Chelsea en 2001.


Lilian Thuram: Llegó al Barcelona en el verano de 2006 procedente de la Juventus que había descendido administrativamente a la Serie B tras el escándalo Moggi. Su gran actuación en el Calcio, donde había jugado también a gran nivel en el Parma, y su condición de finalista con Francia en la final del Mundial de Alemania 2006 depositaron una gran confianza en este jugador. Defensa muy poderoso físicamente y con gran colocación, llegó al Barça en el tramo final de su carrera y, tras dos temporadas en el club, fichó por el PSG, donde se le detectó un problema cardíaco tras más de una década en activo y colgó las botas.


Gianluca Zambrotta: Aterrizó al Camp Nou acompañando a Thuram, ambos de la Juventus. Lateral derecho, llegó con el título de campeón del mundo con Italia conquistado semanas atrás en Berlín y nunca mostró su mejor rendimiento en el Barça. Lateral puramente de contención y adherente en la marca, no alternaba versatilidad ofensiva ni polivalencia. También permaneció durante dos temporadas en el club y en 2008 pasó a formar parte del Milán donde estaría hasta 2012. Con la Azurra, ha disputado los Mundiales de Corea-Japón 2002, Alemania 2006 donde salió campeón y Sudáfrica 2010, amén de las Eurocopas de Bélgica-Holanda 2000 en la que fue finalista, Portugal 2004 y Austria-Suiza 2008. Alberga 100 internacionalidades y 2 goles anotados.


Eidur Gudjohnsen: Único jugador islandés de la historia del Barça, fue el tercer fichaje de Joan Laporta en el verano de 2006. Llegó desde el barrio acomodado de Londres, Chelsea. Tuvo bastantes minutos la primera temporada con Frank Rijkaard aunque el fichaje de Thierry Henry el verano siguiente esfumaría sus posibilidades de ser titular. Cuando Pep Guardiola llega al banquillo en 2008, cuenta con el islandés y permanecería una temporada más en el club. Ese año ganaría el Triplete (Liga, Copa y Champions) donde el delantero nórdico tendría poco protagonismo. Tras el primer título de la Era Pep en el Barça (Copa ante el Athletic en 2009), el entrenador de Santpedor jamás le perdonaría el hecho de pasear por el césped de Mestalla con Alexander Hleb en plena celebración, separado de sus compañeros como un extraño. Ese año abandonaría el Barcelona.


Alexander Hleb: Otra de las piezas de mercado Arsenal-Barça. Era un jugador importante con Wenger en el Arsenal. Centrocampista con presencia y técnico. Tuvo muchos minutos con los gunners y era prácticamente insustituible para el técnico francés junto con Rosicky y Fàbregas en el centro del campo. Por su velocidad, también se podía desempeñar por la banda y en 2008 llega al nuevo Barça de Pep Guardiola por 15 millones de euros. Tras una dura entrada de Pinillos ante el Rácing en la jornada 2, el bielorruso se lesiona y cada vez aparece menos durante la temporada. La temporada siguiente se marcha cedido al Stutgart.


Dmytro Chygrynskiy: Lo recordamos porque es mucho más reciente. En 2009 ganó la última edición de la Copa de la UEFA con el Shaktar Donetsk ante el Werder Bremen y Guardiola se fijó en él. Hizo una buena actuación en la Supercopa de Europa cuando aún jugaba en el conjunto ucraniano pero en el Barça no pudo hacer otra cosa que desempeñar el papel de suplente y jugar algún partido de Copa. Tras una temporada para olvidar del jugador ucraniano, regresó a las filas del Shaktar.


Zlatan Ibrahimovic: Uno de los mejores jugadores suecos de la última década. Se trata de un delantero muy alto, con una esquisita técnica, disparo demoledor y personalidad arrolladora. Llegó al Barça en el verano de 2009 a cambio de Samuel Eto'o que, de ese modo, era traspasado al Inter de Milán. Vino como sustituto del camerunés y registró unos números muy positivos. Es el fichaje más caro de la historia del Barça por encima de el de Marc Overmars. Incluso la victoria frente al Real Madrid en el Camp Nou no se podría haber explicado por el tanto que anotó el delantero sueco. Finalmente, a causa del pronunciado interés del Barça por David Villa, los rumores de la no titularidad del sueco hicieron que abandonase el club por la puerta de atrás rumbo al AC Milan, no sin antes protagonizar algún que otro rifirafe con Guardiola a quien llegó a apodar de forma despectiva como El filósofo.

12 de diciembre de 2010

Lírica Pachanguera: Capítulo 9


A petición de mi compañero y amigo Fran Díaz, esta crónica va dirigida a él en recompensa a su invisibilidad para mí en las últimas sesiones.Ya con el frío característico del invierno, las luces navideñas, los balones embarcados con Álex escalando a lo Spiderman, las cantadas de Carlitos, los balones al palo de El Generalísimo Castro (El Chulo, como diría Bordoy) y más cosas por el estilo, nos situamos en la tercera pista, dándole descanso a la del fondo por una temporadita.

También se trataba de uno de estos días especiales. Hay cosas que te impactan en demasía, que dejan huella en uno y que, por muy tontas que sean, no pueden emprender un firme vuelo desde tu cabeza. En concreto, por vivencias que experimenté horas atrás. Pero bueno... vamos a lo que vamos.

La tarde empezó en el taller de atrás donde fuí con Jorginho y me encontré con Colmena. Por alguna extraña razón, todos estábamos allí dispuestos a inflar el balón. Vamos, lo normal que se hace en los talleres de coches. Nos los pusieron más duro (el balón) que el cuerno de un mamut (Özil) y botaba más que el Jabulani que tantas jornadas de gloria nos dió meses atrás.

Creo que la tarde del viernes se merece un recuadro en el libro de los récords Guinness. No confundir con la cerveza aunque seguro que Mateo ya lo ha hecho. Debe entrar en dicho libro porque, si no calculo mal, éramos unos diecisiete tíos. Más bien eso parecía el banquillo de un partido de fútbol siete. Así que, precisamente por ello, ruego que me perdoneis si no hablo de todos y de cada uno de vosotros. Podría hacerlo si abro cinco blogs más como éste pero algo me dice que no es muy viable que se diga.

Me he dado cuenta de que Álex cada vez me recuerda más a los jugadores de la selección de Rumanía del Mundial de Francia y que a Joel no le gustan mucho los petardos, sobre todo, cuando Carlos en un alárido de inspiración mental lo explota directamente en su camiseta. Vamos progresando, Carlitos.

Jorge, el Barragán, cada día me gusta más de portero demostrando sus buenos reflejos tirándose y protagonizando buenas y decisivas actuaciones. A Colmena le empiezo a conocer en el regate, Escudero como siempre jugó muy tranquilo y de la forma que a mí me gusta y Manolo mejorando progresivamente. A mí me costó coger el punto de enganche pero después me lo pasé bien, un paso inequívoco hacia el buen rendimiento y las ganas de hacer las cosas bien. A Redbull, del que vuelvo a hablar nuevamente, le salieron las cosas bien aunque él se niegue a reconocerlo.

Otra de las cosas de las que me he percatado es que Germán tiene que hacerse un piso en el área rival. Lo llevo viendo bastante tiempo y es un nueve nato. Así que como mejor juega es de delantero centro, esperando que le coloquen buenos balones. Ése es su verdadero y único puesto. Se fue antes por ineludibles compromisos con el Milán Metio.

La academia tuvo la culpa de que el niño Ale llegara tarde. Aún así, lo hizo como siempre y se intentó ir de tios que le sacan un par de cabezas, o tres. Jairo se reconcilió con el gol y marcó un bonito tanto para la cuenta de nuestro equipo, un bonito tiro raso ajustado a la cepa del palo a media vuelta. Todo un debut por la puerta grande. De Rebollo me gustaría decir que sus seis goles (o al menos, es lo que él dice) vinieron acompañados por alguna mirada distraída a las chicas que jugaban al voley mostrando sus turgentes y esculpidos traseros. A decir verdad, me he recreado bastante en la última frase.

La velocidad de la luz es la cifra a la que se aproxima la cantidad de ocasiones que tuvo Paquito y de las cuales, anotó alguna. Torpedo Benamüller, enfundado de Cissé, se consafró como jerarca de la defensa aunque le tiene que dar más el sol para parecerse al trotamundos francés. Droit au but!

Lo realmente divertido de la tarde fue el pique, por así decirlo, entre Muros Rueda y Capi. Faltaban hombres para hacer sucumbir a la bestia que se dirigía al archiconocido personaje. Carlos no podía negar su estupor y Manolo, en posteriores declaraciones, reconoció que en realidad no sabía lo que le dijo el amigo Carlitos. Al final todo se solucionó con un abrazo.

¿Lo ves Fran? Por fin he hablado de tí. Fue, como siempre una gran tarde, con mejor rollo que la anterior, sin fugas injustificadas y con el fútbol tiñiendo cada ápice de la jornada.

  
Por si alguien no sabe a qué me refería exactamente cuando hablé de Álex, tranquilos, allá va la explicación. En la cita mundialista de Francia '98, los jugadores de la selección rumana prometieron teñirse de rubios si pasaban de la fase de grupos. Parece evidente que sí pasaron a los octavos de final.

Viernes, 10 de diciembre de 2010.

6 de diciembre de 2010

FIFA Balón de Oro de color azulgrana


Ya es oficial. Los tres candidatos al máximo galardón individual son Xavi, Iniesta y Leo Messi, lo cual significa que recaerá por segundo año consecutivo en un jugador del Fútbol Club Barcelona. Curiosamente, este importantísimo galardón fusiona el Balón de Oro, concedido por la revista gala France Football y el FIFA World Player que lo otorga el máximo organismo internacional. De este modo, el premio pasa a llamarse FIFA Balón de Oro.

Jean-Piérre Papin, ganador de dicha distinción en 1991, lo comunicó este mediodia. En otro orden de cosas, en caso de que no se lo lleve el argentino, lo ganará un jugador made in La Masía, un hecho del que no conocemos precedentes. Además, pondría fin a un sequía de cuarenta años sin que lo gane un jugador español desde Luis Suárez. La ceremonia de entrega tendrá lugar el próxima 10 de enero.

Anecdóticamente, es la tercera vez en la historia que el podio es ocupado por jugadores del mismo equipo y, en este sentido, el Barça de Guardiola toma el relevo del Milan de Arrigo Sacchi. En 1988 el Balón de Oro acabó en las manos de Marco van Basten, seguido de Ruud Gullit y Frank Rijkaard, todos ellos compañeros en el equipo lombardo.

Muchos temíamos que finalmente se lo llevara Wesley Sneijder tras su gran papel la pasada campaña con el Inter de Milán y en el Mundial con Holanda, donde alcanzó la plata. Es un gran jugador y su calidad queda constrastada en el campo, además de haber sido desterrado por el Real Madrid en su efectiva política de fichajes pero es hora de un merecido reconocimiento a la cantera del Barça. Zanetti, compañero del holandés en el Inter, ha declarado públicamente que es injusto que Sneijder no se lleve el Balón de Oro.Y es que muchos tienen que comprar los balones de oro y otros, sencillamente, los fabrican. Juzguen ustedes...

El caso es que no será un galardón monótono y romperá con la tradición. O repite Leo Messi o acabará en el poder de un español. Seguramente acabará en manos de Xavi Hernandez. Por fin la justicia hizo acto de presencia...

 
 El Mundo Deportivo hacía un llamamiento a la justicia. El de Tarrassa se lo merece por sus pases decisivos en el Barça y su imprescindible actuación con La Roja en Sudáfrica.

4 de diciembre de 2010

Lírica Pachanguera: Capítulo 8


A medida que pasan las tardes, un invitado empieza a hacerse hueco entre nosotros. Sí, me refiero al frío. Y junto a él, todos sus colegas: la mucosidad, las sudaderas gordas, las tardes más cortas y alguna que otra braga. Para la cita del viernes también contábamos con la presencia del amigo Álvaro Torpedo Benamüller así como con la ausencia del colegui Germán por motivos amorosos.

Dicho esto, los primeros compases de la tarde estuvieron marcados por el calentamiento, el toque de balón y los pases para familiarizarnos con la pelotita y soltarnos las piernas. Fue en ese momento cuando constaté la calidad de Torpedo, sus dotes en la retaguardia, su facilidad para sacar el balón jugado y su calidad. La verdad es que Manolo tampoco pasó inadvertido. Marcó tres golazos y no somos pocos los que vemos que su rendimiento y técnica mejoran cada día de forma considerable.

No faltaron los piques, como siempre, en especial, entre Alberto y Álex. Pero esperamos que se imponga la madurez y todo ello se quede donde se debe quedar, en el terreno de juego y no trascienda a cuestiones personales. Mortadelín me pegó alguna patadita que después arreglaba con una sonrisa, muy pícaro el chaval. Rebollo también lo hizo muy bien aunque estaría bien que se relajara un poquito. Estoy seguro de que le beneficiaría. A Colmena, el terror de las nenas, cada día lo veo más parecido a Cesc aunque otros apunten a su comparación con el Pipita. Gran partido del colega.

Jorge no tuvo un buen día y a mitad del partido se colapsó. Un mal día lo tiene cualquiera y estoy convencido de que para la próxima vendrá al cien por cien y mucho más relajado. Como le dije, lo importante del fútbol es saber lo que hay que hacer y saber lo que no hay que hacer. Saber cuáles son tus posibilidades al mando del cuero y detectar que a veces lo más espectacular es lo más simple como un pase preciso. No es necesario comerse el tarro innecesariamente.

Dicho sea de paso, Mateo faltó por segunda vez consecutiva a su cita. Esperamos su pronto regreso. Capi me marcó un gol aunque yo le marqué dos y la calidad de Álex brillaba cual supernova en una constelación (no diré galáctica, para no ser gafe). Álvaro jugó de maravilla, es generoso con el balón e ideal para un equipo de posesión.

Para concluir, sólo decir que fue una buena tarde aunque acabamos más pronto de lo normal. Quizás porque la gente se enfrió o porque los continuos enfrentamientos e increpaciones enrarecieron el ambiente. Sinceramente, espero que haya tardes más pacíficas y de poder seguir rindiendo como lo hice el otro día.

Viernes, 3 de diciembre de 2010.