29 de septiembre de 2013

Gaditanos e innovadores


Las tandas penaltis son algo tan común y mundano que sorprendería su implantación en el mundo del fútbol. Gracias a ellas, España rompió su maleficio de cuartos de final en la Eurocopa 2008 ante la selección azurra y Ramos a lo Panenka derrotaría fantasmas del pasado. Lejos de pensar que su origen tuviera lugar en Inglaterra, Alemania o Italia, en realidad, fue mucho más cerca de lo que muchos pueden llegar a pensar. Fue en Cádiz, en el conspicuo trofeo veraniego Ramón de Carranza que tiene lugar anualmente. Corría la edición de 1962 y hasta entonces solventar los partidos que acababan en empate tras el tiempo reglamentario era algo complejo...

En ese momento, el modo de dilucidar el ganador en un trofeo, eliminatoria o final tras un empate era jugar lo que los ingleses llaman un replay, es decir, un partido de repetición que en algunas competiciones menores de Inglaterra se sigue practicando en la actualidad. Evidentemente, jugar un partido de repetición tenía un efecto de aburrimiento total y económico entre los aficionados, así como un contundente desgaste físico de los jugadores. Hubo casos, incluso, en que los partidos se prolongaban hasta altas horas de la madrugada. Algo había que hacer...

El protagonista de esta anécdota sería Rafael Ballester Sierra, directivo del Cádiz y ex-presidente del humilde UD Gaditana. La final del Trofeo Carranza de 1962 la disputarían Fútbol Club Barcelona y Real Zaragoza que acabaría con empate sin goles tras los primeros noventa minutos. Tras jugar una prórroga, el empate siguió coronando el marcador, tras los goles de Marcelino para el Zaragoza y Re para el Barça.

El árbitro de aquel encuentro, el portugués Joaquim Campos, confuso por no ser capaz de encontrar la forma de acabar con el empate, escuchó la sugerencia de Ballester de ejecutar cinco lanzamientos de penalti. De forma contraria a cómo se hace actualmente, el primer equipo lanzaría sus cinco primeros disparos, tras los cuales sería el turno del contrincante. El Barcelona ganaría la primera tanda de penaltis de la historia y, por extensión, se adjudicaría el trofeo Carranza de 1962 de esta singular forma.

Esta manera de resolver partidos por casos de empate no caería en saco roto. El Manchester United recurrió a la tanda de penaltis para destronar al Hull City en la final de la extinta Watney Cup de Inglaterra del año 1970. Posteriormente, FIFA y UEFA adoptaron de forma oficial la tanda de penaltis para sus respectivas competiciones. La primera vez que un gran título continental se resolvería así sería en la Eurocopa de 1976, en la que República Checa se impuso ante Alemania Federal con el inenarrable gol de Panenka.

Así que, cuando visitéis la Tacita de Plata, recordad la gran aportación que esa ciudad dio al mundo del fútbol...

Fuente: La tanda de penalties, inventada en Cádiz. Blog Peña Cadista 1910.