30 de diciembre de 2013

Resumen futbolístico de 2013


2013 echa su cierre definitivo y, como viene siendo habitual en este blog, analizaremos todo lo que este año que despedimos nos ha deparado. Ha sido un año intenso, con la derrota en la Copa Confederaciones, la tormentosa salida de Mourinho del Real Madrid, la Liga del Barça marcada por la salud de Tito Vilanova y los sonados fichajes de Neymar y Gareth Bale. 

Allá por enero, presenciamos cómo Leo Messi ganó su cuarto Balón de Oro consecutivo, superando el registro de Michel Platini. El argentino ponía broche de oro a una temporada en la que fue máximo goleador en un año natural con unos registros aplastantes. El sorprendente inicio de temporada del Barcelona se truncó con la recaída de Tito Vilanova, siendo sustituido en funciones de interino por otro hombre de la casa como Jordi Roura. Los resultados acompañaban pero el juego no conseguía su máximo esplendor. No obstante, Tito vuelve a hacerse cargo del equipo hasta final de temporada y el Barça logra proclamarse campeón de Liga con 100 puntos, igualando la puntuación del Real Madrid la temporada anterior.

En Copa del Rey, el Barcelona acusa su bajón psicológico y físico. Es superado contundentemente por el Real Madrid en semifinales y el conjunto blanco logra clasificarse para la final que tendrá lugar en el Santiago Bernabéu el 17 de mayo ante el sorprendente Atlético de Madrid de Radamel Falcao, Diego Costa y comandado desde el banquillo por Cholo Simeone. La última victoria colchonera en el feudo madridista data de 1999 con hat-trick de Jimmy-Floyd Hasselbaink. Sin embargo, el Real Madrid acentúa una racha fatídica con la reciente eliminación en semifinales de la Champions ante el Borussia Dortmund, las importantes bajas que acumula el equipo, el ambiente hostil que se respira en las gradas con la inminente salida de José Mourinho y pierde la final 1-2 ante el eterno rival.


Sería también un año de cambios radicales en Chamartín. Mourinho cierra una temporada para olvidar en la que no consiguió ningún título con el Real Madrid (a excepción de la Supercopa de España el verano anterior ante el FC Barcelona). La polémica decisión de la suplencia de Casillas en virtud de Diego López, la desastrosa campaña en Liga de la que se descolgó rápidamente y la dolorosa eliminación ante el Dortmund en Champions fulminaron la continuidad del técnico portugués en la Casa Blanca. Mou salió del Real Madrid rumbo al Chelsea. Llegó Ancelotti procedente del PSG. Salieron jugadores importantes como Özil, Higuaín y Kaká. También llegarían otros como Illaramendi, Isco y Gareth Bale, tras desembolsar ingentes cantidades económicas.

Equipos revelación como la Real Sociedad firmaron un excelente papel en Liga, como ya hicieran diez años antes. El cuarto puesto en Liga de los donostierra les llevaría en volandas a jugar Liga de Campeones junto a Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid. En cuanto a la Europa League, el TAS decidió que Málaga y Rayo Vallecano, que habían logrado buenos puestos en Liga, no participaran en el segundo torneo europeo a nivel de clubes, por cuestiones económicas ajenas a lo deportivo. En su lugar, el Sevilla FC jugaría dicha competición junto al Real Betis y Valencia que sí lo consiguieron en los terrenos de juego. Por la parte baja de la clasificación, Zaragoza, Deportivo y Mallorca descendieron a Segunda División. Sus puestos serían ocupados por Villarreal, Almería y Elche.

La Champions League deparó emoción hasta el final. El Málaga se quedaría a las puertas de las semifinales, tras caer en cuartos ante el increíble Borussia Dortmund de Lewandowski, Götze, Reus y Klopp. El cuadro de semis lo compondrían Bayern de Múnich contra FC Barcelona y, por el otro lado, Real Madrid ante los alemanes del Dortmund. Dicho esto, el equipo azulgrana cayó dolorosamente ante el Bayern. Los teutones vapulearon a un acéfalo Barça por 4-0 en el Allianz Arena y 0-3 en el Camp Nou, tras una desastrosa eliminatoria de los de Tito Vilanova. En la otra semi, Real Madrid cayó por 4-1 en Dortmund con un póker del delantero polaco Robert Lewandowski. En la vuelta disputada una semana después en el Bernabéu, el 2-0 cosechado por los blancos no pudo certificar un puesto en la final de Wembley el 25 de mayo.


Dicha final la disputarían Bayern de Múnich y Borussia Dortmund. Curiosamente, no pudimos ver la tan ansiada final española entre Real Madrid y FC Barcelona por segunda temporada consecutiva. Esta final tendría claro sabor alemán. Dicho sea de paso, sería la cuarta final de la historia protagonizada por dos equipos del mismo país: Real Madrid - Valencia (2000), Milan - Juventus (2003) y Manchester United - Chelsea (2008). El Bayern de Jupp Heynckes levantaría su quinta Orejona en Wembley tras imponerse al Dortmund por 2-1.

Con la verano y el canto de la chicharra, la Copa Confederaciones abrió sus puertas. España, en calidad de campeona del mundo 2010, se clasificó a semifinales tras vencer en la fase de grupos a Uruguay, Nigeria y Tahití (con victoria por 10-0 en este último). El encuentro de semis ante Italia se saldaría con 0-0 al final de los noventa minutos reglamentarios, en un claro advenimiento del partido de cuartos de final ante Italia en la Eurocopa 2008, el encuentro que cambió nuestra historia. Desde los once metros, los fallos italianos y la puntería de Jesús Navas sellaron el pase a la gran final en la que esperaba la gran favorita y anfitriona del torneo, Brasil.

La final es un turbio recuerdo para los nuestros. La altitud, el cansancio físico tras la agotadora semifinal ante Italia, el calor, la humedad y la superioridad brasileña destrozaron a una hierática selección de España con un inapelable 3-0, con doblete de Fred y gol de Neymar, recién firmado por el FC Barcelona. La derrota fue dura, aunque sintomática de mejora. Hay un aforismo en esto del fútbol según el cual, el campeón de la Copa Confederaciones realiza un mal Mundial al año siguiente. En cualquier caso, un España - Brasil es la final adelantada del Mundial, las selecciones que desplegan el mejor fútbol en estos momentos.


Tras la disputa del torneo estival, el mercado de fichajes tuvo muchos nombres propios. El más importante de ellos fue la lamentable recaída de Tito Vilanova que abandonó su cargo de entrenador en el FC Barcelona con el fin de dedicarse a su salud. En su lugar, llegó Tata Martino, un técnico argentino poco conocido en nuestra Liga, excepto por su paso en Tenerife en la temporada 1991/1992. Con el argentino, llegó Neymar y sobre él recayó al tarea de minimizar los efectos del tan temido cambio de ciclo en el FC Barcelona. Además, mediante unas controvertidas decisiones, la directiva prescindió de dos de los jugadores más importantes del club en los últimos años: Éric Abidal, que superó satisfactoriamente sus problemas de salud, y David Villa, rumbo a Mónaco y Atlético de Madrid, respectivamente.

En Europa, Sir Álex Ferguson dejaba el banquillo del Manchester United tras 26 temporadas y 28 títulos con los Diablos Rojos. Pep Guardiola llegaba como flamante nuevo entrenador al Bayern de Múnich. Con él llegaron Thiago Alcántara y Mario Götze. Mourinho aterrizaba en Londres. De este modo, Bayern y Chelsea (campeón de la Europa League ante el Benfica en Ámsterdam) se vieron las caras en la Supercopa de Europa. O dicho de otro modo, Mourinho y Guardiola se volvieron a cruzar. La Supercopa cambiaba el Luis II de Mónaco, sede habitual desde 1998, por el Eden Arena de Praga. Pep volvió a ganarle la partida a Mourinho, en una final cargada de emoción hasta el último instante. El 2-2 anotado por Javi Martínez en el último suspiro llevó el partido a la tanda de penaltis. Tras el fallo de Lukaku, el Bayern ganaba su quinto título del año y Guardiola estrenaba su particular vitrina con los germanos.

Por su parte, Martino también se estrenaba con título tras la consecución de la Supercopa de España ante el Atlético de Madrid. El Barça comenzó con el mejor arranque de Liga de toda su historia y apostó por un juego más directo y vertical en el que se rasea menos el balón. Los comentarios negativos del entorno no se hicieron esperar. Muchos lo acusarían de pérdida de identidad o traición a la filosofía. El Barcelona le ganaría la partida al nuevo Real Madrid de Carlo Ancelotti tras el 2-1 cosechado en el Camp Nou. La recta final de este agonizante 2013 se saldaría con la conquista del Mundialito de Clubes por parte del Bayern de Pep y con la oportunista lesión de Leo Messi en su bíceps femoral, que lo ha mantenido alejado de los terrenos de juego un total de 5 meses, razón por la que, obviamente, el crack argentino ha tenido menos repercusión en el juego azulgrana.


En resumen, 2013 nos ha traído buenos momentos futbolísticos. Comienza 2014, un año de Mundial en el que esperamos mejorar nuestros logros. Sin otro particular, desde Mis peloteros favoritos se os desea un Feliz 2014 y... ¡nos vemos el año que viene!

23 de diciembre de 2013

¿Qué fue de Tato Abadía?


El fútbol actual está repleto de merchandising y personajes mediáticos. A todo ello contribuye el prototipo de jugador metrosexual que compagina su carrera deportiva con ostentosas campañas publicitarias de moda y perfumes. Sin embargo, hace escasamente dos décadas, las cosas no eran así. Jugadores con poblados bigotes, piernas aún mas frondosas y relucientes alopecias nos deleitaban con su pundonor sobre los terrenos de juegos. Tato Abadía daba buena prueba de ello.

Agustín Abadía Plana, más conocido como Tato, nació el 15 de abril de 1962 en la localidad oscense de Binéfar. Sería en el club de su pueblo natal donde comenzaría su carrera deportiva, el CD Binéfar allá por 1980. En 1984 da el salto y ficha por el mítico CD Logronés, equipo donde conseguiría sus mejores registros, llegando a conseguir el ascenso a Primera División en 1987. Permanece dos temporadas más en el conjunto riojano hasta que en 1989 ficha por el Atlético de Madrid. Sólo jugaría una temporada en el equipo colchonero y, al año siguiente, volvería al Logroñés.

Jugaría tres temporadas más en el club riojano, hasta 1993, año donde ficharía por otro equipo histórico de nuestro fútbol: el Compostela. Con el cuadro gallego, logra una de las gestas más importantes de la historia del club, al conseguir el anhelado ascenso del equipo santiagués a la categoría de oro del fútbol nacional en la temporada 1994/1995. Volvería una vez más a Logroño en la temporada 1996/1997 en la que no pudo evitar el descenso del equipo a Segunda División. Tras el drama del descenso, vuelve a sus orígenes y cuelga las botas en las filas del Binéfar en 1999.

Tato Abadía era un centrocampista que suplía sus limitaciones técnicas con grandes dosis de entrega, tesón y pundonor. Su juego se basaba en el físico y la valentía. Jugador bregador, es especialmente recordado por su particular aspecto, su gran bigote y su brillante calva. Tenía además gran carisma. Una anécdota que lo refleja data de un partido de la temporada 1992/1993 contra el Real Madrid en el Bernabéu. Abadía se echó el equipo a la espalda y marcó los dos tantos de su equipo. Eso valió ser incluido en el once semanal de la prestigiosa revista France Football. 


Su pundonor quedó fuera de toda duda en un partido ante el Betis en la temporada 1994/1995 cuando militaba en el Compostela. Tato Abadía recibió una fuerte entrada de Hristo Vidakovic. Tras salir momentáneamente del terreno de juego para ser atendido, volvió a jugar, firmó un partidazo, lució a un gran nivel, atoró la circulación del balón en el centro del campo bético y marcó un gol. En el minuto 86 fue sustituido y recibió una sonora ovación. Posteriormente, se supo que Tato Abadía había jugado durante 70 minutos con el astrágalo roto.

Poco antes de la disputa del Mundial de Estados Unidos 1994, el seleccionador Javier Clemente llegó a decir de él: Abadía es un currante del fútbol y que en el fútbol hacía falta gente como él. Esta frase fue la respuesta a un periodista que le preguntó si había alguna posibilidad de llevarlo a la selección y, evasivamente, Clemente reconoció que había seguido su rendimiento muy de cerca. En esta misma línea, preguntado por quienes fueron sus mejores entrenadores, el Tato afirmó que habían sido Fernando Vázquez y Carlos Aimar.

Después de retirarse en 1999, Abadía probó suerte como entrenador, profesión que sigue ejerciendo de forma profesional. Comenzó entrenando a las categorías inferiores del Binéfar y luego recala en el Logroñés, el equipo que ha marcado su vida. Tras un breve paso por el Girona, se vuelve a unir al conjunto riojano como ya haría en su etapa como jugador pero, esta vez, como director deportivo. En 2008 entrena al Calahorra para luego entrenar en las categorías inferiores de la Federación Riojana de Fútbol.

Este mítico jugador fue partícipe de 4 ascensos en toda su trayectoria: Binéfar (en la temporada 1983/1984 de Tercera a Segunda B), Logroñés (1986/1987 de Segunda a Primera), Compostela (1993/1994 de Segunda a Primera) y con su club de formación, el Binéfar (de Tercera a Segunda B en la 1997/1998). Entiendo que soy muy difícil de olvidar por mi fisionomía. Era calvo, con bigote y con una peculiar forma de correr pero, en realidad, como jugador no soy recordado por nada más. Así era el fútbol para Tato Abadía, sin aspavientos ni estridencias. Pundonor en estado puro.


Fuente: Eduardo Casado (1/6/2011) Qué fue de... Tato Abadía. Web El blog de los futbolistas olvidados.

16 de diciembre de 2013

Barça - Manchester City: Una eliminatoria de infarto


Este mediodía ha tenido lugar el sorteo de los emparejamientos de octavos de final de la Champions League. El azar ha deparado unos encuentros de infarto entre: Real Madrid-Schalke 04, Atlético de Madrid-Milan, Chelsea-Galatasaray, Manchester United-Olympiakos, PSG-Bayer Leverkusen, Bayern de Múnich-Arsenal y FC Barcelona-Manchester City. Estos dos últimos encuentros han captado especialmente la atención por la envergadura de dichos equipos así como por compartir condición de favoritos al cetro continental.

La mano inocente de Luís Figo en el sorteo de Nyon ha cruzado a ambos equipos, a pesar del profundo respeto que inspira el conjunto inglés. En efecto, el Manchester City era el escollo a evitar en octavos de final, tanto por el potencial de su fútbol como por la cantidad de grandísimos jugadores que aglutina. Por si eso fuera poco, el equipo citizen desvalijó el mercado de fichajes el pasado verano con las incorporaciones de Fernandinho, Jesús Navas, Negredo, Jovetic y Demichelis. 

Dirigidos por un viejo conocido de nuestra Liga como Manuel Pellegrini, el Manchester City cuenta con jugadores de la talla de el Kun Agüero, David Silva, Samir Nasri, Edin Dzeko y una vieja gloria del Barcelona como Yaya Touré. No obstante, el equipo campeón de la Premier League en 2012 es un neófito en los octavos de final de la Champions League. Nunca antes se había conseguido clasificar para dicha ronda. En las dos entregas anteriores, los jugadores entonces dirigidos por Roberto Mancini no consiguieron pasar de la fase de grupos. 


No acudieron a la máximo competición europea desde 1968 a 2011, ya inmersos en su etapa dorada. En consecuencia, ello le adjudicó un escaso coeficiente UEFA que lo encuadró en grupos realmente duros las dos últimas temporadas, lo que le imposibilitó acceder a octavos. En la campaña 2011/2012 compartió grupo con Bayern de Múnich, Nápoles y Villarreal, mientras que en la 2012/2013 tuvo que lidiar con Real Madrid, Borussia Dortmund (que precisamente se volverían a cruzar en semifinales con victoria alemana) y Ajax de Ámsterdam. Únicamente, sumaría 3 puntos de 18 posibles, quedando colista del mismo.

Además, cuenta con la vitola de haber vencido al Bayern de Múnich en el Allianz Arena por 2-3 en la última jornada. La ida de esta eliminatoria de infarto tendrá lugar el próximo 18 de febrero en el Etihad Stadium mientras que la vuelta se celebrará en el Camp Nou el 12 de marzo. En la competición doméstica, el Manchester City actualmente es cuarto en la Premier League con 32 puntos y se encuentra a 4 puntos del Arsenal, líder, a quien el pasado sábado le endosó un inapelable 6-3, lo que hace del estadio inglés un feudo inexpugnable. De hecho, el equipo citizen ha ganado todos los encuentros disputados en el Etihad, aunque el rendimiento a domicilio se merma respecto a su potencial como local.

Así es el Manchester City

El Manchester City es un club construido sobre los pilares del dinero árabe desembolsados por el jeque Sulaiman Al-Fahim. Gracias a la inyección económica inoculada de la mano del grupo inversor propiedad del jeque, el equipo inglés ha contratado a un gran número de estrellas desde 2008, llegando a romper prácticamente el mercado de fichajes. La llegada a las islas de jugadores como Navas, Silva, Agüero, Balotelli, Robinho, Adebayor o Tévez no se podría haber explicado sin la opulenta influencia de Al-Fahim. 


Campeón de Premier en 2012, The Sky Blues no han sido capaces de reflejar en Europa las grandes actuaciones que han llevado a cabo a nivel nacional. La titánica capacidad adquisitiva del City no ha derivado en un criterio sólido para construir una plantilla. Tanto es así que resulta habitual ver a jugadores como Jesús Navas o Edin Dzeko calentando el banquillo. Se estima que el Manchester City es el equipo que más dinero ha desembolsado en las últimas seis temporadas, alcanzando los 1.000 millones de dólares.

En la portería, cuenta con un guardameta de garantías y muy seguro como Joe Hart. El cancerbero inglés también se ha consolidado en la selección inglesa que necesitaba un portero de garantías tras los fiascos de James, Robinson y Green. A nivel internacional, es el primer gran portero inglés desde David Seaman que también formó parte de las filas del City en la 2003/2004. La línea defensiva de la escuadra citizen es, quizá, la más floja. Aunque cuenta con grandes nombres., Zabaleta y Richards no ofrecen seguridad por la derecha. Por el flanco izquierdo, hay mejores alternativas como Clichy, Kolarov y, en ocasiones, Lescott, dada su polivalencia. El centro de la defensa es más sólido, aunque muy denostado por las lesiones, y está formado, principalmente, por Kompany y Demichelis, rotando con Nastasic y Lescott. El capitán Kompany es el único jugador con la condición de insustituible y tiene un futuro prometedor con la selección belga.

El centro del campo es mucho más compacto y cuenta con jugadores de la talla de Javi García, formado en las categorías inferiores del Real Madrid, Rodwell, jugador con gran recorrido, técnica y buen trato del balón y Milner, jugador de grandes condiciones físicas que contribuye a descongestionar la zona media. Touré Yaya, ex-jugador del Barcelona, y Fernandinho, el gran fichaje procedente del Shaktar, generan contundencia y verticalidad al mismo tiempo. El marfileño, mediocentro de contención en su etapa barcelonista, ha ido ganando conducción y proyección ofensiva con el paso del tiempo, llegando prácticamente a ser un atacante más del equipo. Además, su demoledor disparo a media distancia le hace temible. Pugnará un bonito duelo en el centro del campo con su ex-compañero Sergio Busquets. 


La delantera del City es realmente el plato fuerte del equipo. Silva por la izquierda aporta frescura, dinamismo y toneladas de calidad técnica. Navas está firmando menos minutos de los que sugerían las expectativas, aunque suya es la labor de aportar el desborde por el flanco derecho y abastecer de centros a los jugadores más adelantados. El de Los Palacios mantiene competencia con Samir Nasri, aunque el francés también se puede desempeñar como mediapunta. En la punta de ataque se encuentra la dinamita del equipo liderada por el Kun Agüero, compañero de Messi en la albiceleste y sumido en un extraordinario estado de forma, Álvaro Negredo, a un nivel resolutivo increíble, Edin Dzeko, recambio natural del delantero de Vallecas, y el joven Stevan Jovetic, ex de la Fiorentina, que actualmente se encuentra lesionado.

Previsiones de la eliminatoria

A decir verdad, el gran peligro del Manchester City es la temible delantera que atesora. Será un problema que puede tener el Barcelona si tiene demasiadas bajas significativas en defensa. La presencia ofensiva de Dani Alves cerrando las acometidas de David Silva serán fundamentales en el transcurso de la eliminatoria. La titularidad de Navas sigue siendo un enigma. El talón de Aquiles de los citizen es la línea defensiva. El costado derecho ofrece pocas garantías con Zabaleta y Richards, de modo que el papel ofensivo de Neymar causando estragos por la banda izquierda será decisivo. La presencia en el medio del campo de dos de los mejores centrocampista del mundo como Sergio Busquets y Touré Yaya subirá al alza el nivel de la eliminatoria. Otro jugador a tener en cuenta será Fernandinho, fichaje estrella procedente del Shaktar que está siendo la sensación de la Premier. Por otra parte, la poca eficacia del City lejos del Etihad Stadium será un elemento a aprovechar por los de Tata Martino. La vuelta de la eliminatoria en el Camp Nou será clave.

No hay ningún precedente en partido oficial entre ambos equipos, dado el incipiente poder futbolístico de los ingleses. El partido más sonado entre ambos equipos fue la edición de 2009 del trofeo Joan Gamper en la que los ingleses se impusieron por 0-1 con un gol de Petrov. Asimismo, el FC Barcelona fue el equipo invitado en la inauguración oficial del estadio del Manchester City en 2003 (City of Manchester entonces, aunque este nombre sólo se usa en competición europea). Los ingleses vencieron por 2-1. A modo de conclusión, Barça y Manchester City, dos de los mejores equipos de Europa, protagonizarán el plato fuerte de los octavos de final, un encuentro inédito en Europa y que todos estamos deseando ver. 


Fuente: Borja Cabrera Sánchez (16/12/2013). Camino de Lisboa: Manchester City. Vavel.com

10 de diciembre de 2013

Partidos históricos: Alemania - Holanda 1990


Uno de los partidos con más cartel en el fútbol mundial es, sin duda, un Alemania contra Holanda. Germanos y tulipanes se han enfrentado en un gran número de ocasiones, entre las cuales, las más recordadas son la final del Mundial de Alemania 1974 entre la Mannschaft de Franz Beckenbauer y Gerd Müller contra la Naranja Mecánica de Johan Cruyff y comandada por Rinus Michels. Catorce años después, el combinado Oranje se cobraría su particular vendetta en la semifinal de la Eurocopa 1988 en Hamburgo por 2-1.

Dados dichos precedentes, Alemania y Holanda se enfrentarían en los octavos de final del Mundial de Italia 1990. El escenario donde tendría lugar tan atractivo duelo sería nada menos que el Estadio de San Siro en Milán. Curiosamente, tres jugadores del Milan formaban parte de la plantilla de Holanda (Van Basten, Rijkaard y Gullit), mientras que otros tantos tenían contrato con el Inter de Milan (Matthäus, Brehme y Klinsmann), de modo que este choque tenía el espíritu de un derbi lombardo en el mejor estadio posible donde se puede disputar dicho encuentro.

Italia 1990 es uno de los Mundiales más grises de la historia. De la final en Roma se recuerdan los agrios insultos de la afición italiana a Diego Armando Maradona por haber apeado a la azurra en semifinales y las petulantes respuestas verbales de El Pelusa a los tifosi. No obstante, el encuentro de octavos entre Alemania y Holanda es uno de los partidos más emocionantes del Mundial, por su carácter de revancha histórica, por la esencia de clásico lombardo que albergaba y, por qué no decirlo, por ser un choque en el que se respiró un ambiente realmente caldeado...


Alemania llegaba a la eliminatoria tras haber realizado un soberbio papel en la fase de grupos. Goleó 4-1 a Yugoslavia, vapuleó 5-1 a Emiratos Árabes Unidos y no pudo pasar del empate ante Colombia. La selección teutona fue de menos a más en el Mundial que, finalmente, se acabó adjudicando la Copa del Mundo en una de las peores finales de la historia. Por su parte, Holanda accedió a los octavos de final con tres empates ante Inglaterra, Irlanda y Egipto. Al quedar empatado a todo con Irlanda, tulipanes e irlandeses fueron a un sorteo que dictaminaría quien pasaba como segundo de grupo. Irlanda se llevó el gato al agua y Holanda consiguió pasar como tercera.

Una vez comenzado el partido ante Alemania, el clima prebélico se respiró desde el principio. Los roces comenzaron en el minuto 22. El guardameta holandés, Hans Van Breukelen, y el delantero alemán, Rudi Völler, se ensalzaron en una discusión a causa de un empujón. Jürgen Klinsmaan intentó calmar el fulgor de la batalla, lo que desembocó en un cruce de opiniones con mal sabor de boca. Por si eso fuera poco, el centrocampista tulipán, Frank Rijkaard, le tiró de la oreja y escupió a Rudi Völler. El colegiado argentino Juan Carlos Loustau, de forma muy drástica, sacó tarjeta roja a ambos jugadores.

Después de la acción, ambos jugadores se disponían a abandonar el terreno de juego. El holandés, que se encontraba varios metros detrás del alemán, emprendió una pequeña carrera y completó un gesto que volvió a envilecer los ánimos. Rijkaard volvió a escupir a Völler y el escupitajo del jugador del Milan cayó entre los canosos rizos de Tía Kathe (este era el apodo que su compañero, Thomas Berthold, le puso, al parecerse a la típica señora mayor alemana por sus rizos). Vóller se retiró del campo con total estoicidad y lo que ocurrió entre ambos dentro del túnel del vestuario permanece oculto bajo un halo de misterio.



El partido se reanudó con 10 jugadores en cada equipo y Jürgen Klinsmann adelantaría a Alemania en el minuto 51 de juego tras un fantástico centro por banda izquierda de Berthold. Dicho sea de paso, jugadores alemanes como Riedle o Kohler serían grandes conocedores del fútbol italiano en los años venideros, al jugar en Lazio y Juventus, respectivamente. Alemania era una selección resolutiva pero su fútbol era bastante táctico y anodino y nada vistoso. Por otra parte, Holanda bajó considerablemente el nivel con respecto a la Eurocopa que alzó dos años antes.

En la recta final de partido (minuto 82), Brehme anota lo que parece la sentencia de Alemania. El 2-0 subía al marcador de San Siro tras un perfecto tiro colocado con rosca desde la frontal del área. El colegiado argentino señalaría en el minuto 89 el punto de penalti a favor de Holanda. Ronald Koeman, considerado uno de los mejores defensas del mundo por entonces, recortó distancias en el marcador, aunque obviamente no hubo tiempo para lograr el empate. Si dos años antes Holanda se tomó la revancha por la tortuosa derrota en la final de Alemania 1974, esta vez sería la selección teutona quien se vengase.

Alemania se acabaría proclamando campeona de aquel Mundial, su tercero y último hasta la fecha. En cuartos de final, eliminaría a Checoslovaquia y en semifinales apearía a Inglaterra de Gascoigne en los penaltis tras el fallo de Stuart Pearce. Así, llegaría a la final de Roma en la que se repetía la final de la edición anterior ante Argentina de Maradona. Esta vez la suerte cayó del lado alemán y la Mannschaft volvió a tomarse su segunda derrota en aquel Mundial, tras perder sus dos últimas finales de Copa del Mundo en España 1982 ante Italia y México 1986 ante Argentina. Así pues, la venganza es un plato que se sirve frío.


Ficha técnica del partido

Alemania 2-1 Holanda. Goles: Jürgen Klinsmann 51', Andreas Brehme 82' y Ronald Koeman, 89' (p).

Alemania: Illgner; Reuter, Brehme, Kohler, Augenthaler; Buchwald, Berthold, Littbarski, Matthaus; Völler y Klinsmann (Riedle 78'). Entrenador: Franz Beckenbauer (ALE).

Holanda: Van Breukelen; Van Aerle (Kieft 66'), Koeman, Rijkaard; Winter, Witschge (Gillhaus 79'), Van't Schip, Wouters, Van Tiggelen; Gullit y Van Basten. Entrenador: Leo Beenhakker (HOL).

Árbitro: Juan Carlos Loustau (ARG).

Incidencias: Partido de octavos de final del Mundial de Italia 1990 disputado el 24 de junio en el Estadio de San Siro ante 74.559 espectadores.


Fuente: Episodio Copa Mundial 1990 Ataque de la "Lama" Rijkaard a la "tía Kathe", Página ContiSoccerWorld y Fiebre Maldini.

6 de diciembre de 2013

Brasil 2014: ¿El mejor Mundial de la historia?


Esta tarde ha tenido lugar el tan esperado sorteo del Mundial de Brasil 2014. Tras los nervios y las pertinentes sorpresas, ya se conocen los grupos definitivos del próximo Campeonato del Mundo. Un Mundial es todo aquello a lo que un jugador puede aspirar, uno de esos momentos mágicos que, quizá por su eventualidad, nos eleva en un estado narcótico que se prolonga durante el mes que dura el torneo. Brasil 2014 será un gran campeonato pero, ¿es posible que estemos ante el mejor Mundial de la historia?

Para argumentarlo, en este Mundial estarán los ocho campeones del mundo (Uruguay, Italia, Alemania, Brasil, Inglaterra, Argentina, Francia y España). Razón por la cual, las grandes estrellas mundiales se darán cita en Brasil 2014 para intentar lograr la mayor gesta posible que puede alcanzar un futbolista, levantar la Copa del Mundo. Jugadores como Leo Messi, Cristiano Ronaldo, Neymar, Ribéry, Iniesta. Özil, Falcao y Robben nos deleitarán con su amplio repertorio de genialidades en los estadios brasileños. No obstante, otros grandes nombres como Bale, Ibrahimovic y Lewandowsky no acudirán al certamen.

Bale, galés de nacionalidad, no asistirá al torneo, dado el bajo nivel de calidad del combinado nacional de Gales. Curiosamente, otro gran jugador galés como Ryan Giggs tampoco pudo disputar un Campeonato del Mundo en su dilatada carrera deportiva. Por su parte, Zlatan Ibrahimovic se quedó a la puertas de comprar el billete hacia Brasil en la repesca ante Portugal, tras el excelso hat-trick de Cristiano Ronaldo. El sueco repetirá ausencia tras Sudáfrica 2010. Lewandowsky tampoco jugará el Mundial, tras la no clasificación de Polonia para el mismo.

Además, sólo habrá un debutante en el Mundial: Bosnia-Herzegovina. Tradicionalmente, hemos sido testigos de pequeñas selecciones que lograron grandes actuaciones en el Mundial en condición de debutantes. Selecciones como Croacia en 1998 o Camerún en 1982 dan crédito a ello. En la presente ocasión, sólo debutará el conjunto de Bosnia que, por si no fuera poco, cuenta con grandes jugadores como Dzeko o Seferovic. Otros equipos no debutantes pero poco habituales en el Mundial como Bélgica tiene realmente muchas posibilidades de ser la revelación del torneo. Es un equipo joven, con gusto por el buen trato de balón y con grandes nombres propios como Kompany, Vertonghen, Hazard, Fellaini y Lukaku. Tras faltar a los dos últimos Mundiales (su última participación fue en Corea y Japón 2002), los europeos vuelven para desplegar su potencial.

España, vigente campeona del mundo, se estrenará el 13 de junio a las 21:00 horas en Salvador de Bahía ante Holanda, reeditando, de este modo, la final del anterior Mundial de Sudáfrica 2010. Es la primera vez en la historia que la final del certamen anterior se repite en un partido inaugural. Será el grupo de la muerte del Mundial junto a Chile de Vidal, Alexis o Medel y la cenicienta Australia. De este Grupo B saldrá el rival de Brasil en octavos que comparte Grupo A con Croacia, Camerún y Chile.

Por último, la selección de Brasil, que venía cayendo en cuartos en las dos últimas ediciones, presenta un bloque con grandes talentos individuales y es la favorita para adjudicarse el Mundial, tanto por la calidad que posee como por su condición de anfitriona. Francia, otro equipo venido a menos, parece haber encontrado el relevo generacional que venía arrastrando desde la retirada de Zidane y posee jugadores jóvenes con gran futuro como Kondogbia, Pogba y Cabaye. Uruguay, cuarta en el Mundial anterior, llega con el título de campeona de América en 2011 y en el Top 10 del Ránking FIFA. Alemania presenta un equipo lleno de talentos como Özil, Götze y Reus. Tanto por calidad como por potencial, Alemania tiene todas las papeletas para ser una de las grandes selecciones del Mundial. El fútbol teutón, sin duda, está experimentando un cambio de ciclo que se confirmó con la final alemana de Champions la temporada anterior. Todo esto y más hace pensar que, probablemente, estemos en un Mundial que pase a la historia.


3 de diciembre de 2013

¿Qué fue de Jocelyn Angloma?


Nacido el 7 de agosto de 1965 en Guadalupe, Jocelyn Angloma es uno de los jugadores más recordados por la afición del Valencia durante los años noventa. Lo curioso de este mítico jugador francés es que, pese a su acreditada calidad, no fue partícipe de los opulentos éxitos de la selección de Francia en el Mundial 1998 y en la Eurocopa 2000. Este formidable lateral derecho se desempeñó con la selección francesa con la que fue internacional en 37 ocasiones y con la que disputó la Eurocopa de Inglaterra 1996, pues Guadalupe es un departamento francés de Las Antillas.

Comenzó su carrera futbolística en el modesto Etoile Morne hasta que en 1985 recaló en el Stade de Rennes. Posteriormente, probó fortuna en diversos equipos franceses como el Lille (1987-1990), PSG (1990-1991), hasta que pasó a formar parte de la disciplina del Olympique de Marsella. Con Les Phocéens lograría su mayor gesta a nivel de clubes, al ganar la Liga de Campeones en 1993, la única hasta la fecha del fútbol francés. Jugaría un año más en el equipo galo hasta que en 1994 pondría rumbo a Turín para jugar con el Torino.

Dicho sea de paso, con el Marsella, Angloma se reafirmó como lateral derecho insustituible. La defensa del equipo del Ródano campeón de Europa estaba formada por Di Meco en el lateral izquierdo, Desailly y Boli como pareja de centrales y Angloma como lateral derecho de amplio recorrido. En el Torino firmó dos temporadas a gran nivel. Allí se consagró como un lateral derecho de gran recorrido, fondo físico y una velocidad frenética. De hecho, se llegó a decir que Angloma era capaz de recorrer los 100 metros lisos en 11 segundos, un dato realmente impresionante. 


Tras su andadura en el Torino, el defensa francés fue contratado por el Inter de Milán. Con el club nerazurro, Angloma solamente disputó la temporada 1996/1997, año en que aterrizó en nuestra Liga, concretamente, en el Valencia. A pesar de su provecta edad cuando llegó al Valencia (32 años), el ex-jugador del Marsella se adueñó rápidamente del lateral derecho del equipo valencianista. Por su personalidad, fue un jugador que se ganó a la siempre exigente afición ché, donde aún hoy es recordado con una grata sonrisa entre los aficionados. Angloma jugó en el Valencia durante 5 temporadas (1997-2002).

Formó parte del llamado clan de los Treintañeros de Oro, junto a Cañizares, Ayala, Pellegrino y Kily González, recordado especialmente por las dos finales de Champions League en la que yacieron ante el Real Madrid (2000) y Bayern de Múnich (2001). Tras estos dos umbríos recuerdos, Angloma se resarció con el Campeonato de Liga con el Valencia en 2002, año en el que abandonaría el equipo ché con 38 años. No obstante, solamente sería una retirada momentánea. En 2006, Angloma volvió a vestirse de corto con la selección absoluta de Guadalupe, a la que ayudó a clasificarse a la Golden Cup de la CONCACAF de 2007, jugando de centrocampista. Tras doblegar a Canadá con un golazo, la selección de Guadalupe cayó en semifinales ante México.

Curiosamente, Angloma pudo jugar con Guadalupe, pese a haber jugado a nivel absoluto con Francia, puesto que esta primera selección no está reconocida por la FIFA. Jugó 37 partidos con la selección de Francia en los que anotó un solo gol. Aún así, perdió la titularidad ante uno de los laterales derechos más reconocidos de los años noventa: Lilian Thuram. De este modo, no estuvo presente ni en el Mundial 1998 ni en la Eurocopa 2000.


Fuente: Víctor Romero (18/9/2009). Jocelyn Angloma. Blog Futbolistas con Karma.